Las instituciones rectoras de la salud pública en Costa Rica hace ya algunos años dieron un importante paso estratégico: enseñarle a la población cómo cuidar su salud, es mejor que tener que estarle atendiendo sus enfermedades crónicas. A raíz de esto, y considerando las epidemias de enfermedades cardiovasculares y de obesidad que vivimos, viene esta recomendación del artículo al que referimos en La Nación: "poner en línea al casado". No se refieren a aquél hombre con esposa, sino a ese plato común de los restaurantes ticos populares: arroz, frijoles, carne o huevo (fritos), pasta o picadillo de papa, plátano maduro frito, pan o tortilla y alguna solitaria hoja de lechuga por ahí.
Como bien lo afirma María Eugenia Villalta, gerente médica de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS): “El casado actual es una bomba calórica cargada de carbohidratos.” Las instrucciones básicas que recomienda para modificar el casado hacia un plato más saludable son:
- prepararlo con aceite vegetal,
- que tenga un 50% de frutas y verduras no harinosas,
- un 25% de productos de origen animal (carne o huevo)
- y 25% de carbohidratos (arroz, frijoles, o verduras harinosas como papa, yuca o camote).
Alguna vez fuimos una población de gente físicamente mucho más activa, ahora la dieta del tico requiere cambiar... o rodar hasta morir.
Artículo completo en "La Nación."
Comentarios
Publicar un comentario