Es de las pruebas tempranas de la
paternidad y puede amenazar la paz del sueño familiar. Todos los padres hemos
pasado por ese período en el que un bebé, por lo demás sano, comienza a pasar
tiempos tormentosos asociados con la salida de sus nuevos dientes.
El proceso suele comenzar entre los
6 y 8 meses de edad y si bien, para algunos bebés, las molestias pueden ser
mínimas, para otros no. Los síntomas más comunes asociados al síndrome de la
dentición son irritabilidad, rechazo del alimento, aumento de la salivación,
el deseo de morder o masticar objetos duros, encías inflamadas y sensibles y
trastornos del sueño. Al tener un bebé con la inclinación a estarse llevando
continuamente manos y objetos a la boca, esto podría eventualmente hacerlo más
susceptible a infecciones respiratorias o digestivas. Si bien entendemos que la
dentición por sí misma no causa fiebre, catarro ni diarrea, es un tiempo en el
que el niño está particularmente susceptible a la entrada de gérmenes en medio
de todas sus estresantes molestias.
Afortunadamente la Homeopatía puede
dar alivio al síndrome de la dentición, como a muchas otras molestias de la
salud infantil. El tratamiento, como todo tratamiento homeopático, debe ser
individualizado, de acuerdo con las molestias específicas que presente el bebé
y la forma como reacciona su organismo, haciendo un abordaje global de su condición. Esto con las sustanciales ventajas de la excelente tolerancia para
el bebé, carencia de toxicidad y el bajo costo del medicamento homeopático.
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